AYUNTAMIENTO TECOMENSE EN CAÍDA LIBRE.......

Permítanme expresarme
Héctor Raúl Avila Vázquez
PERIODISTA

Contrario a lo que prometió Lupillo García Negrete, el Ayuntamiento tecomense está en bancarrota, y no se ve como pueda superar esa crisis que lo llevará seguramente en poco tiempo, a tomar medidas drásticas que repercutirán en el desánimo de decenas de funcionarios que lo acompañaron en campaña y que en este tiempo, de forma irres ponsable se despacharon con la cuchara grande.

Y es que en solo un año de gestión y en los primeros seis meses del actual ejercicio fiscal, la adminis tración de Lupillo se gastó todo, absolutamente todo y comprometió las finanzas, al grado de poner en riesgo la operatividad de los servicios públicos que por ley debe brindar a la población, como son la recolección de basura, el alumbrado público, el suministro de agua potable.

Es decir, de no pasar un milagro, Lupillo empezará a cobrarle la factura a los tecomensos, (como él mismo les ha llamado), por confiar en un político completa mente incompetente y despilfarrador.

Sólamente por citar un dato, la administración actual a pesar de todas las complicaciones financieras por las que atraviesa el país, y que repercuten en los gobiernos en sus tres niveles, cometió la irresponsabilidad de elevarse el sueldo, en algunos casos, en más del 50% y pagar cantidades totalmente fuera de la realidad económica del municipio con mayor pobreza en el Estado.

De esa forma, Lupillo no solo mintió a los tecomenses al prometerles que sería una administración austera, sino que los traicionó al elevarse el sueldo a cifras indignantes y que pueden ser consultadas en su propia página de transparencia.

De esta forma, funcionarios como el Oficial Mayor que en el anterior gobierno ganaba 22 mil pesos mensua les, hoy se despachan con más de 30 mil pesos, o el chofer del presidente municipal que cobra más de 22 mil pesos al mes, o su asesor que cobra 33

mil pesos cada mes. Lo duda ? Consulte la página

Pero lo realmente grave, es el número de personal contratado por su gobierno que supera por mucho a la nómina anterior, y que no se refleja en la mejora de los servicios o de las obras, ya que a un año de gobierno, los tecomenses perciben retroceso en la calidad de la recolección de basura, agua potable, y en seguridad pública, en la que por más que el alcalde quiera evadir su responsabilidad, la ciudada nía le queda claro, que es el municipio quien ha autorizado la apertura de centros de vicio y que con ello, las patrullas y policias que deberían vigilar las colonias, comunidades y proteger a la ciudadanía, hoy se entretienen más en los pleitos que se originan con gente alcoholizada en esos lugares y que además ocasionan otro tipo de problemas sociales.

Si lo duda, basta con preguntarle a los vecinos de la colonia Primaveras del Real para dimensionar las afectaciones.

Así pues, Lupillo hoy pretende el apoyo de Nacho Peralta para sacar adelante la administración que a base del desfalco, está en poco tiempo sumergida en gran crisis financiera que seguramente será motivo de sanciones por parte del Congreso del Estado.

Veremos pues, si el gobernador le cree el cuento a García Negrete de su amistad incondicional y le sigue financiando los excesos que su gobierno ha cometido en el primer año de gobierno, en donde el pueblo tecomense tiene que pagar los lujos y excesos no solo del alcalde, sino de sus hermanos, a quienes los funcionarios les llaman también “jefes” y les rinden tributo para no ser despedidos.

En caída libre el Ayuntamiento, con un capitán perdido toda vía en el festejo de un triunfo electoral que le costará muy caro al municipio.

No es con limpieza de avenidas el justificar los sueldos que percibe, pues es una labor obligatoria den tro del área de mantenimiento de espacios públicos.

Tampoco es justificable, el disponer de policias muni cipales, de tránsito y vialidad para levantar basuras, porque los agentes tienen la alta responsabilidad de estar aptos para cuidar a la ciudadanía, porque para eso son contratados ayer, hoy y siempre.