ANAYA- CANALLA ??
En la disputa por el poder en México, llama la atención que en algunos medios de comunicación, las notas periodísticas relacionados con temas de corrupción.
En ellos involucran a dos actores destacados de la política nacional; a Ricardo Anaya Cortés candidato de la coalición Por México al Frente y a Rosario Robles Berlanga titular de la secretaría de desarrollo agrario, territorial y urbano SEDATU
Los los casos son ventilados y la información involucra la acción de la Procuraduría General de República (PGR) que ante cada asunto, lleva a cabo acción diferente.
En el caso de Anaya, la PGR tiene abierta carpeta de investigación desde Octubre de 2017 por probable lavado de dinero.
Recientemente la investigación tuvo un giro cuando el abogado Joaquín Xamán McGregor, acudió a la Procuraduría para expresar que sus clientes, propietarios de la empresa Tesorem, cuyas identidades están protegidas por la ley, deseaban aportar información relacionada con el candidato presidencial.
Declararon ante el ministerio público federal, haber sido contratados por el empresario de Querétaro Manuel Barreiro Castañeda, que entre 2016 y Enero de éste año, para realizar operaciones financieras en paraísos fiscales, cuya finalidad era que llegaran 54 millones de pesos a manos de Ricardo Anaya.
Al enterarse de que existe carpeta de investigación en la PGR que lo involucra, Anaya comentó a los medios de comunicación que ha pagado puntualmente sus impuestos.
Manifestó su disposición para declarar sobre la denuncia en su contra, por presuntamente orquestar red de empresas para triangular suma millonaria en algunos paraísos fiscales, para ocultar la compraventa de un inmueble.
Ricardo Anaya dijo a los medios, que los priistas, además de corruptos, “son unos cobardes que avientan la piedra y esconden la mano”.
Señaló que “el PRI-gobierno desea distraer la atención de los millonarios desvíos de recursos señalados por la auditoría superior de la federación, ocurridos bajo la titularidad de Rosario Robles en las secretarías de desa rrollo social (Sedesol) y de desarrollo agrario, territorial y urbano (Sedatu), entre muchas otras dependencias.
“Desvíos que confirman lo que ha sido la tónica de este sexenio: una corrupción desmedida por parte de la actual clase gobernante.
José Antonio Meade es cómplice de esos desvíos ya que fungió como tapadera”.
El caso de la presunta corrupción que involucraría a Rosario Robles Berlanga titular de la SEDATU, presente por esos días en los medios de comunicación, se origina en el reporte, que entrega a la Cámara de diputados, la gente de la auditoría superior de la federación ASF
En el último reporte entregado dice la ASF, que “se han observado montos con posible daño al erario por 6,879 millones de pesos.
Los programas presupuestarios relacionados con las contrataciones son principalmente sobre desarrollo social, agrario o territorial.
Se ha constatado, como parte de la fiscalización efectuada, que en ese tipo de esquemas participaban, sobre todo, universidades públicas como proveedoras de bienes y servicios.”
De la cantidad señalada en el reporte de la ASF, se acredita el desvío de mil 311 millones de pesos durante la gestión de Rosario Robles.
El periódico Reforma publicó que en tres auditorías forenses, que la ASF detectó el desvío de recursos a través de empresas fantasmas en 2014 y 2015.
Rosario Robles Berlanga, pidió que se “documenten públicamente los recursos financieros de los que dispongo y si existe en el extranjero alguna cuenta o transacción a mi nombre”.
Robles acudió a la PGR por la publicación de la nota del periódico Reforma, en la que se señala que la ASF había documentado supuesto desvío de recursos públicos hacia su persona.
“Si de esas investigaciones se desprenden responsa bilidades penales contra cualquier funcionario público de la Secretaría de Desarrollo Social o Sedatu, incluida yo, he sostenido y sostengo, que se actúe con todo el peso de la ley, declaró en aquél entonces..
Del caso de Rosario Robles, pasó en redes sociales de involucrarla en la corrupción a responsabilizar de esos hechos al PRI.
El tema de la corrupción es central en el discurso de los candidatos.
Eso indica la gravedad de problema en México.
Sirve en el contexto electoral para desacreditar la credibilidad de las aspirantes a la presidencia.
Por ello, el tratamiento del tema es diferente en la PGR.
Para Ricardo Anaya existe la denuncia de un particular que lo involucra en un ilícito y por ello, de abrió carpeta de investigación.
Para Rosario Robles no hay consecuencia legal, porque no hay denuncia ante la PGR, no es función de la ASF proceder en esa línea.
Esa circunstancia nos lleva a recordar lo que el presidente Peña Nieto le dijo al principio del sexenio;
“No te preocupes, Rosario, hay que aguantar, porque han empezado las críticas, las descalificaciones de aquéllos a quienes ocupan y preocupan la política y las elecciones”.
No pasa nada.
Igualito que en Colima, con el asunto de MAM y sus testaferros..
.No pasa, ni pasará nada
Nomás así...
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